Cemuc Champey (Guatemala)

El chofer nos habia dicho que se trataba de un viaje de 6 horas, simpre por aca a eso hay que sumarle minimo otras 2. La busetita era una poronga y cargada con 14 personas, asi que del viaje a Semuc Champey no hay mas que decir que fue relmente una tortura.

El bus nos dejaria en Lanquin, donde tendriamos que conseguir alojamiento en Semuc que estaba a unos 9 km de alli. Rapidamente lo conseguimos, en la misma puerta del parque. El lugar es simplemente increible, un rio trasparente en medio de la jungla con monos y bichos

de todo tipo.

En plan de ahorro decidimos acampar que era la opcion mas barata, unos Q. 15 que son como unos 7 pe argentos. Nos pusimos a caminar por la zona a ver si conseguiamos un pollito para morfar a las brasas pero no tuvimos suerte. Cocinamos algo de todos modos, luchando contra la

falta de leña y tuvimos que cambiar el lugar de acampe debido a una invasion masiva de hormigas que nos estaban morfando vivos. Luego subimos al comedor por unas birras y despues de unos mates a dormirla.

A la mañana siguiente luego de desayunados nos dirigimos a nuestra primera excursion, las grutas Santa Maria cuya entrada se encontraba a escasos 200 mts de nuestro camping. Las grutas venian de un rio que nacia dentro de la montaña, te daban unas velas y te internas en total como 1,5 km adentro. Se formaban piletones zarpados, ibas escalando y mayormente nadando con la vela en alto para que no se apague, la verdad una experiencia muy buena. Llegamos a un pileton donde podias saltar desde unos 3 metros en la oscuridad.

Salidos de las cuevas nos dirigiamos al parque de Semuc Champey, de paso nos quedaba un puente de unos 12 a 15 mts de altura que caia al rio, Carreta armado de coraje se avento al vacio, seguido por quien escribe y luego el chori. Nos dirigimos a la entrada del parque y

comenzamos a caminar, el lugar es simplemente increible. Muy dificil de explicar lo que hacen tantas cascadas grandes, chiquitas, piletones, selva, agua trasparente y la sierra todas juntas en un lugar. Es un paraiso. Pasamos el resto de la tarde nadando, saltando de piedras o haciendo snorkel. Ya cansados volvimos al campamento a tomar unas chelas, morfar un excelente guiso de lentejas a la mexicana (de lata claramente) y de ahi a dormirla ya que al siguiente dia

arriba a las 5:30.

Levantados y desayunados arrancamos viaje nuevamente en una buseta atestada de gringos hacia nuestro nuevo destino, Flores para de alli dirigirnos a Tikal, nuestro ultimo destino en Guatemala.